Defensa: Algunas proteínas son los que llamamos anticuerpos cuya función es atacar y destruir virus y bacterias que provocan enfermedades.
Movimiento: Existen proteínas motoras y contráctiles que son las encargadas de mover las células, y de transportar moléculas en el interior de la célula.
Catálisis: Muchas proteínas están especializadas en catalizar reacciones químicas. Son las denominadas enzimas.
Mensajes: Unas proteínas llamadas hormonas peptídicas se unen a proteínas receptoras en células especificas para cambiar la actividad de la célula, participando así en la recepción y transporte de mensajes dentro del organismo.
Estructura: Las proteínas estructurales proporcionan un soporte mecánico a las células. Algunas crean estructuras como las uñas y/o el pelo. O también conforman la estructura de las células, por ejemplo la forma de los glóbulos rojos.
Transporte: Las proteínas son las responsables de permitir a determinadas moléculas la entrada y salida de las células, y de transportar determinados compuestos por todo el organismo.
Todas estas funciones dependen de la estructura tridimensional (plegamiento) de cada proteína, que a su vez depende de la secuencia de aminoácidos que la forman. Las proteínas pueden ser desplegadas o desnaturalizadas, destruyendo así su estructura tridimensional, lo que hace que pierda sus funciones. Además pueden producirse plegamientos anómalos que ocasionan determinadas enfermedades.
La ecuación de la vida en su forma más simple es la siguiente:
Los genes del ADN pasan información al ARN en nuestras células (Transcripción), a partir del ARN se sintetizan las proteínas correspondientes (Traducción), las cuales dictan el desarrollo y estructura característico de cada organismo, lo que se conoce con el nombre de fenotipo.
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